El teólogo brasileño e impulsor de la Teología de la Liberación criticó el pasado miércoles en Zaragoza a la jerarquía católica, especialmente al Papa Ratzinger, cuyo discurso calificó de "antiguo y retrógrado". Boff acusó a la Iglesia de estar lejos de los pobres, de los indígenas, de las prostitutas y de los niños de la calle, así como de ser cómplice de la crisis ecológica que sufre el planeta